Un oleoducto que va de Rotterdam a Venlo, en los Países Bajos, y luego se divide para continuar hasta dos localidades en Alemania, necesitaba una sustitución parcial; así se constató en una inspección en la estación de distribución de Venlo. Tras cortar la tubería vieja, los trabajadores encontraron un magnetismo residual indeseable. Esto hacía imposible la soldadura. El resultado fue el pánico por falta de tiempo.
Evitar tiempos de inactividad
El petróleo tuvo que fluir por la tubería al día siguiente, porque la reserva era demasiado pequeña para permitir un tiempo de inactividad más prolongado. De lo contrario, muchas operaciones industriales alemanas se quedarían sin petróleo, lo que daría lugar a importantes reclamaciones por daños y perjuicios para el contratista, por lo que el tiempo era esencial. Afortunadamente, nuestro flexible experto en desmagnetización Ger pudo reprogramar su otro trabajo y llegó rápidamente al lugar. Llevó un desmagnetizador móvil y envolvió la tubería con un cable que creó un contracampo para neutralizar el magnetismo presente en la tubería. Unas tres horas más tarde, el proceso se había completado y la soldadura era posible de nuevo.
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